Para celebrar el día del río Bogotá en el año 2023, los docentes del área de Ciencias Naturales y Educación Ambiental tomamos la decisión de trabajar el tema de las PTAR (Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales) ya que estas son fundamentales para la recuperación del río y su ecosistema. Algunos puntos importantes a considerar son:

  • Las PTAR permiten el tratamiento de las aguas residuales, reduciendo la contaminación del río y mejorando su calidad.
  • La implementación de PTAR en los municipios cercanos al río es esencial para evitar la descarga de aguas residuales sin tratar en el río Bogotá.
  • Las PTAR también contribuyen a la recuperación de la fauna y flora del río, favoreciendo la biodiversidad y mejorando la calidad de vida de los habitantes de la zona.
  • La educación y concientización ciudadana en torno al uso responsable del agua y la importancia del tratamiento de las aguas residuales es clave para el éxito de la recuperación del río Bogotá.

En resumen, trabajar el tema de las PTAR como eje central de la recuperación del río Bogotá es una excelente manera de generar conciencia sobre la importancia de la protección y cuidado del medio ambiente, y de promover acciones que contribuyan a la recuperación de uno de los cuerpos de agua más importantes de la ciudad.

PLANTAS DE TRATAMIENTO DE AGUAS RESIDUALES - PTAR

Objetivos:

  • Informarnos sobre la enorme tarea que significa descontaminar el río Bogotá a través de las plantas de tratamiento de aguas residuales, en este caso PTAR SALITRE y PTAR CANOAS, y con la ayuda de todos los ciudadanos.
  • Reflexionar sobre la importancia y necesidad de contribuir en la recuperación del río Bogotá y realizar algunas recomendaciones para poner en práctica con el fin de aportar en la recuperación de nuestro río.

Justificación:

Las aguas residuales son las que resultan del uso de los baños, duchas y sanitarios. Estas aguas son conducidas por tuberías hasta plantas de tratamiento, una de ellas PTAR el Salitre, que recibe las aguas del norte y centro de la ciudad contribuyendo al saneamiento del rio Bogotá.

A pesar de que existen estas dos plantas de tratamiento de aguas residuales, la ciudadanía debe entender que es solo una ayuda y que la responsabilidad de una cultura ambiental referente al agua es de todos.

La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, hace un llamado a que todas las personas que viven en la ciudad desechen correctamente los residuos y no se arrojen a la infraestructura del alcantarillado de la ciudad.

La presencia de ciertos residuos de aseo personal al interior de los sistemas, se convierten en material de difícil extracción por lo que aumentan los tiempos y dineros invertidos en el mantenimiento de las redes, así como en el tratamiento de las aguas residuales. Además, estas obstrucciones generan colapsos del sistema representados en encharcamientos afectando la movilidad en las vías de la ciudad y en algunos sectores residenciales.

Así mismo, los pañitos y toallas húmedas pueden terminar en humedales, ríos y quebradas afectado de manera directa los ecosistemas que representan el medio ambiente de la ciudad y la región.

El establecimiento de sistemas de tratamiento de aguas residuales es importante para proteger la salud pública y el medio ambiente. Como las aguas residuales van a ser vertidas a un cuerpo receptor natural (mar, ríos, lagos), es necesario realizar un tratamiento para evitar enfermedades causadas por bacterias y virus en las personas que entran en contacto con esas aguas, y también para proteger la fauna y flora presentes en el cuerpo receptor natural. El reúso del agua tratada, riego de áreas verdes, riego de cultivos, uso Industrial y de servicios, confirma que el tratamiento de las aguas residuales debe garantizar la inexistencia de efectos nocivos a la salud. Este implica la evaluación de tratamientos utilizados en Colombia y el correcto aprovechamiento de estos en correlación con la normatividad vigente.

LEYENDA DEL RÍO BOGOTÁ:

La leyenda dice que el río surgió muchos años atrás, tantos que aún no llegaban los españoles a colonizar América. Entonces, un dios venido de otras tierras, Bochica, clavó una vara de oro y rompió la roca del Tequendama. Gracias a ello una gran inundación se convirtió en una cascada y luego en una corriente que traería prosperidad a los Muiscas que agradecieron esta bendición. Desde entonces, el río Bogotá existe y es testigo de cómo la ciudad cambia y crece con los años.

Aunque la historia tiene muchas versiones y ya hace parte de la tradición cultural, denota la importancia de este accidente geográfico para la capital del país; y no es para menos, por sus características, el río, es epicentro de actividad económica, fuente de bienestar y parte fundamental de los ecosistemas de la zona. Sin mencionar que siempre ha estado en la mira de ciudadanos y líderes quienes hasta hoy se preocupan por el descuido al que ha sido sometido y la necesidad de su recuperación.

COMO CONTRIBUIR DESDE EL HOGAR A NO CONTAMINAR MÁS EL RÍO BOGOTÁ:

Para un mejoramiento de la calidad del agua en nuestros ríos, se deben tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • Separar en el hogar adecuadamente todos los residuos generados en el diario vivir y aquellos que no debemos botar en los residuos orgánicos, almacenarlos de forma correcta para posteriormente depositarlos en los contenedores creados para este fin en droguerías (medicamentos), almacenes de cadena, centros comerciales u otras instituciones que brindan la colaboración de la recolección de estos (tapas pet, aceite de cocina, pilas, diferentes tipos de químicos de aseo y uso industrial, aparatos tecnológicos, etc.).
  • Procurar usar productos de aseo biodegradables (jabones de diferentes usos)
  • Tener un depósito adecuado y mantenerlo con la higiene necesaria en cada baño, para no arrojar el papel higiénico o los pañitos en el sanitario, evitando arrojar basuras en el alcantarillado, lo cual es necesario para no aportar este tipo de residuos sólidos a las vertientes internas del río dentro de la ciudad.
  • Los constructores y maestros de obras que realizan modificaciones o arreglos en los hogares deben evitar conectar el sistema de aguas lluvias a los patios y cajas de aguas residuales; éste debe ir por separado del alcantarillado sanitarios, y vertiéndose en la calle.
  • Tenemos que ahorrar agua a través del uso de cargas completas de ropa en la lavadora, y no demorarse mucho en la ducha.

AGUAS RESIDUALES

¿Qué son las aguas residuales?

Cuando hablamos de aguas residuales, estamos haciendo referencia a todo tipo de agua que haya sido afectada de forma negativa por la acción del ser humano. De este modo, quedarían fuera aquellas aguas que, por causas naturales, no sean aptas para el consumo o, por ejemplo, también todas las aguas que, habiendo sido afectadas por la acción del hombre, sin que lo sean.

En este sentido, las aguas residuales son todas aquellas aguas que han sido usadas en los entornos domésticos y urbanos, en las industrias y ganaderías, así como las aguas naturales que, por accidente o mala praxis, se hayan mezclado con las anteriores. De este modo, nos encontramos con que las aguas residuales son aguas, pero, además de agua, también contienen una gran cantidad de elementos contaminantes, ya sean sólidos o disueltos en la misma agua.

Respecto a la contaminación que pueden portar las aguas residuales hay que decir que se trata de una variedad casi tan amplia como las acciones que el ser humano puede realizar sobre el agua. Se pueden encontrar productos químicos procedentes de uso doméstico (jabones, detergentes, cosméticos, etc.), productos sólidos (papel higiénico, toallitas “desechables” de algodón, plásticos de diversos tamaños, etc.), metales pesados y muy contaminantes procedentes de la industria (plomo, zinc, mercurio, cadmio, bromo, etc.), y también restos orgánicos, procedentes, principalmente, de la materia fecal y los orines.

¿Cómo se clasifican las aguas residuales?

Las aguas residuales se pueden clasificar según su cantidad y el tipo de sustancias químicas que contienen; según sus características bacteriológicas; según la relación entre agua y materia en suspensión y materia disuelta; o según su procedencia.

La procedencia es la forma de clasificación más común. Según ella, se distinguen cuatro tipos de aguas residuales (que, a su vez, pueden subdividirse en otras categorías).

¿Cómo se tratan las aguas residuales?

El tratamiento de aguas residuales, o depuración de aguas residuales, consiste en una serie de procesos físicos, químicos y biológicos que buscan eliminar los contaminantes presentes en el agua resultante del uso humano o de otros usos. La depuración comienza recogiendo las aguas de los sectores urbanos y sectores industriales, y busca devolverla al ciclo del agua, ya sea retornándolas en las vertientes de los ríos, en el mar o reutilizándolas.

Entre los principales métodos de tratamiento encontramos el decantador primario (sedimentación gravitatoria), el flotador por aire disuelto (separación de partículas en suspensión mediante burbujas) y los tratamientos químicos. Sin embargo, en todos los procesos de depuración suele haber tres grandes fases: el tratamiento primario (decantación), el tratamiento secundario (proceso biológico de eliminación de materia orgánica y una decantación secundaria) y un tratamiento de los fangos que se producen en las anteriores fases.

PLANTAS DE TRATAMIENTO DE AGUAS RESIDUALES – PTAR

¿Qué es la Planta de Tratamiento de Agua Residuales Canoas (PTAR Canoas)?

Esta planta de tratamiento es un proyecto que, cuando finalice, recibirá las aguas residuales de las cuencas del río Fucha, Tunjuelo, Tintal y del casco urbano del Municipio de Soacha, que son transportadas por los interceptores y elevadas por la Estación de bombeo de Canoas.

El proyecto tiene una gran importancia para Bogotá, pues beneficiará a más de 14 municipios desde Soacha hasta Girardot y contribuirá a la descontaminación del río Bogotá.

¿Qué es la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Salitre (PTAR Salitre)?

Este proyecto, liderado por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), es de gran importancia para la comunidad y el medio ambiente, ya que tratará un volumen de 7 m3 de agua por segundo e impedirá que un promedio de 450 toneladas mensuales de basuras llegue al río. Será decisivo para lograr la descontaminación del Río Bogotá.

¿Dónde caen las aguas negras de Bogotá?

Las aguas residuales del norte y centro de Bogotá llegan a la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales El Salitre, ubicada en el noroccidente de la ciudad entre las localidades de Suba y Engativá, luego de que el agua ha sido tratada en la planta, se vierte al río Bogotá a la altura de la calle 80.

Residuos obtenidos en las PTAR